El Nepotismo en las organizaciones
El nepotismo es una costumbre muy arraigada y viene de tiempos inmemoriales. En las PyMEs de familia es algo natural pero muchas veces su adopción no es bien estimada y mucho menos, quizás, las consecuencias. También se da en la política, asiduamente, y en cualquier otro tipo de organización
Ejemplos: Decía la periodista María Laura Avignolo, oportunamente:
“La polémica por la eventual designación de Jen Sarkozy, hijo del presidente francés, a un cargo en La Defense no se detiene y tiene insólitas derivaciones”. Desde el jefe de Estado, Nicolás Sarkozy, acusando a la prensa y a su ofensiva de haber tirado al príncipe Jean “a los lobos” hasta un pedido de adopción presidencial de cuatro jóvenes socialistas en el palacio del Eliseo”. .
Dijo el presidente en un discurso frente a un grupo de alumnos: "lo que cuenta en Francia es no haber nacido bien sino trabajar duramente y probar que uno ha estudiado", Justo eligió el día que su Jean Sarkozy está acusado de nepotismo por tratar de conseguir un cargo con la sola condición de "ser hijo de..." el presidente, en este caso.” ‘Recién ha cursado dos semestres de la facultad de Derecho, este año no ha pisado la Universidad y apenas tiene 23 años” dijo la periodista.
Cuatro jóvenes desocupados socialistas decidieron tomarse la polémica con humor corrosivo. Una mañana, se presentaron al palacio del Eliseo con una insólita solicitud: ser adoptados por el presidente.
Cada uno con un cartel, donde se reproducía en versión gigante de su demanda de adopción, los cuatro militantes socialistas se aproximaron cordialmente a los policías del palacio del Eliseo para poder depositar su solicitud.
¿Cuál es la esperanza de los chicos con un padre de tal influencia? Conseguir un primer empleo a tiempo completo y no pensar en buscar una pasantía sin salario o contratos precarios a duración determinada, que es todo lo que encuentran cuando terminan su carrera.
Creo que es tiempo de que los políticos comprendan que, su rol a es para servir a la gente y no servirse a él y los suyos. Es tiempo de que cada joven o persona tenga las mismas oportunidades y chances de los que le ofrecen esto a sus hijos o parientes. Generalmente ocurre, que los aplaudidores de turno de los políticos o monarcas o presidentes, o cualquiera que tenga un rango superior nadie se atreve a decirle al “monarca” que ha perdido el Norte y no corresponde utilizar el poder para rodearse de parentela o amistades intimas, que generalmente son ineptos.
En nuestro país ocurre lo mismo, pero no daré nombres que todos conocen.
Entre otros casos internacinales, están
Siria. Bashar al Assad dirige Siria desde el año 2000, cuando ascendió la presidencia tras la muerte de su padre, Hafez, que gobernó el país desde 1970.
-
Corea del Norte: Kim Jong- il; el Querido Líder” de Pyongyang, sucedió al Gran Líder Kim iI-sung, tras la muerte de éste en 1994: La dinastía rige el país desde 1948.
Egipto: Gamal Mubarak se perfila como sucesor de su padre, Hosni Mubarak, que ostenta el poder desde 1981. Gama ocupa un cargo en el Partido Nacional Democrático.
Otros casos: Venezuela, Cuba, Argentina, Francia, Reino Unido, etc.
Pero no es la primera vez que, las diferencias políticas 'interfieren en las relaciones familiares, sea una empresa o cualquier organización. Lo que no se tiene en cuenta son los conflictos parentales, difíciles de resolver, sus consecuencias en la organización y el afectamiento futuro de la misma, además de la pérdida de credibilidad hacia abajo.
¿Qué conclusiones podemos extraer de estos casos para las empresas de familia?
¿Qué sucede con la familia cuando por razones políticas, por diferencia de criterios, etc. alguien del núcleo familiar toma un rumbo independiente?
¿Hay vuelta atrás cuando las relaciones familiares ya están en estado de necrosis?
¿Pero qué sucede con la empresa cuando no se formaron cuadros sólidos de reemplazo del protagonista principal?
Si se confió en la continuidad de, en estos casos citados, los hijos, y éstos se desvinculan, tiene su proyecto propio, buscan otros caminos o se alejan abruptamente; ¿En quién se puede confiar ahora para que continúe la empresa?
¿Conocíamos la proyección de nuestros hijos, sus intereses, sus apetencias, sus gustos o sin respetarlos decidíamos por ellos en función de algún interés personal?
¿Y ahora qué hacemos? ¿Tiramos por la borda todo lo realizado?
¿Qué pasa por la cabeza de estos hombres que no le interesa lo que piensa la opinión pública (clientes, proveedores, colegas, etc.) al colocar casi impunemente a su familia en puestos de tanta importancia?
¿Qué deudas o relaciones tienen con los hijos para que se jueguen sin pudor en estas decisiones, a veces tan controvertidas?
¿Qué intereses los vinculan para que desafíen el reto de la sociedad? (trasladado a la empresa de familia, implica: resto de los familiares, proveedores, clientes, etc.).
¿De qué colaboradores se rodean estas personas, que nadie se atreve a decirles que se están equivocando o han perdido el foco de su gestión?
En el mundo, cuando una empresa seria designa directores, los selecciona en función de su idoneidad y experiencia entre otras cualidades. En la empresa de familia: ¿Actuamos de la misma manera?
¿Está preparada la organización para aceptar al sucesor en la empresa familiar?
Al designar a nuestro sucesor: ¿Estamos pensando en nosotros, en él o en nuestros intereses? ¿Esos intereses son los mejores para la empresa de familia?
Para finalizar: ¿Está preparado el sucesor para asumir las responsabilidades planteadas en el nuevo desafío?
Estas preguntas en torno a la sucesión del fundador o líder supremo, está ligada al destino de la organización cuando éste por alguna razón desaparece o se equivoca en las decisiones estratégicas que ponen en peligro la trascendencia de la organización o a la y la seguridad de los habitantes o a la familia.
Los lectores podrán aportar, con su experiencia y reflexión muchas cosas más…
Hasta pronto.